La selección de la máquina llenadora de vidrio no es algo llamativo, pero es muy esencial al manejar bebidas carbonatadas y bebidas sin gas. Una disposición inadecuada puede provocar refrescos planos, derrames de espuma o botellas agrietadas. La kombucha y otras bebidas carbonatadas deben manejarse de forma diferente a las bebidas sin gas como el café frío, por lo tanto, la máquina debe ser capaz de manejar el comportamiento de la bebida. Esta guía explica las principales diferencias, ofrece ejemplos sencillos y brinda consejos sobre cómo evitar problemas durante el envasado.
Diferencia principal: El control de presión es clave en el llenado de bebidas carbonatadas
Las bebidas gaseosas como refrescos, cerveza y agua con gas requieren una presión adecuada. La máquina defectuosa provoca espuma, botellas medio llenas o incluso botellas rotas. Los llenadores isobáricos también llenan las botellas y luego estabilizan la carbonatación, sin embargo otras bebidas como jugo o té funcionan bien con llenadores por gravedad o al vacío. Un productor de kombucha en Oregón experimentó con el llenado por gravedad y obtuvo botellas planas y explosiones, pero el sistema isobárico resolvió el problema. La lección aprendida: el control de presión no es algo en lo que se deba escatimar. Si trabaja tanto con bebidas sin gas como con gaseosas, utilice un llenador a presión con dos funciones o dos máquinas diferentes.
Higiene y protección contra la oxidación: la máxima prioridad en el llenado estático de bebidas
En el envasado de bebidas no alcohólicas como jugos, té o agua saborizada, los aspectos más críticos son la higiene y el oxígeno. En ausencia de carbonatación, incluso una leve contaminación o exposición al aire puede destruir el sabor, alterar el color o reducir la vida útil. Las llenadoras deben estar fabricadas en acero inoxidable liso y contar con un sistema CIP que permita una limpieza fácil. La oxidación es otro peligro, especialmente para cafés fríos o jugos frescos. Llenar el café frío con nitrógeno justo después del envasado ayuda a eliminar el oxígeno. Las cabezas antiguas y el flujo suave también minimizan las salpicaduras y la mezcla con oxígeno. En resumen, las bebidas sin gas requieren llenadoras que mantengan condiciones limpias, herméticas y precisas.
Precisión y velocidad de llenado: adaptarse a las necesidades de diferentes características del producto
Cuando selecciona una máquina llenadora de vidrio, determina la velocidad y precisión de su bebida. El llenado más lento y controlado de los productos carbonatados debe utilizarse para evitar la formación de espuma y pérdidas, y se emplean máquinas con control de flujo y sensores de variabilidad. El jugo o el té son bebidas sin gas que pueden llenarse más rápidamente; no obstante, la precisión sigue siendo crucial. Una empresa artesanal de refrescos redujo sus pérdidas en un 15 por ciento al reemplazar un llenador por uno con sensor, y un embotellador de jugos de Florida recurrió a llenadores de vacío de alta velocidad para atender grandes pedidos sin desperdicio. El punto clave es que las bebidas gaseosas deben llenarse con mayor cuidado y suavidad. Sin embargo, las bebidas aún pueden llenarse rápidamente; simplemente deben mantener la precisión.
